127.000 m2 en Canning . Integrado por 15 edificios de alturas variables en conjunto con un zócalo comercial, creando de esta forma un proyecto mixto.
El proyecto está dividido en 2 etapas:
• La primera, comprendida por el conjunto de torres al frente, de uso comercial o privado, con el amplio sector comercial tanto en subsuelo, planta baja, y primer piso, generando unos 53.000 m2.
• La segunda etapa, cuenta con 8 torres de viviendas, con sus amenities incluidos, pileta y sector de gimnasio, agregando otros 74000 m2 más. Para poder abastecer de estacionamiento a los propietarios y los visitantes se construirán en el subsuelo estacionamientos que permiten liberar la zona de planta baja.
El punto fuerte del proyecto, se encuentra en la reinvención de la plaza verde en el primer piso. Al ocupar la planta baja con el centro comercial, queda poco espacio disponible para la naturaleza, por ello es que la idea fue desde un comienzo poder ubicarla por encima de toda el área central, generando un jardín tanto para las torres de oficinas, como para algunos usos comerciales gastronómicos. De este modo se puede aislar de manera más eficiente a los locales comerciales, reduciendo la necesidad de acondicionarlos constantemente, sino que también, se mantiene la capacidad absorbente del terreno. Esto se traduce en una reducción de las lluvias que deberán ser recolectadas, siendo estas últimas simplemente las generadoras de más naturaleza en dicha plaza.
El espacio central del centro comercial se ve interrumpido por un gran patio de triple altura, que va desde el primer subsuelo hasta el primer piso, funcionando como nexo entre los distintos usos que se encuentran allí, y también, dotando de luz natural al subsuelo gracias a los 2 grandes patios ingleses. Mediante escaleras mecánicas uno puede ir desde cualquier nivel al siguiente, y continuar con un recorrido visual que se va generando piso a piso. La estética adoptada, contará con una combinación de hormigones a la vista de bajo mantenimiento, junto con el uso del metal para darle un aspecto sobrio y sencillo.Todo esto entremezclado con la fuerte huella verde que se genera en primer piso gracias a la terraza verde confirman entre sí una armonía entre construido y naturaleza.
St. Thomas Village, el proyecto vanguardista de 127.000 m2 en Canning
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